¿Tiene ventajas una auditoría de empresa?
Aunque la primera reacción ante una auditoría sea la de preocupación, en realidad esta revisión de la documentación y gestión empresarial conlleva numerosas ventajas. De hecho, con una auditoría se pueden detectar fallos de funcionamiento, así como proponer soluciones para dichos fallos, ya sea sobre un departamento o área concreta, o sobre la gestión global de la empresa. De hecho, supone más ventajas que inconvenientes, a menos que se quiera defraudar.
Los expertos en auditoría de empresas como Legalnet, realizan una inspección detallada de un área de la empresa con el objetivo de verificar su correcto funcionamiento. De su trabajo se puede conocer la situación de una empresa, pero también supone una ventaja de cara a generar confianza ante clientes potenciales, inversores y proveedores. No es tan fiable una empresa que jamás audita sus cuentas y operaciones, que una que sí que lo hace.
Además, una auditoría supone garantizar el cumplimiento de la legislación vigente, así como del Plan General Contable. Así, por ejemplo, para analizar las cuentas anuales de una empresa, se necesitan especialistas en auditoría de cuentas anuales que sean capaces de detectar fallos, actuaciones fraudulentas o debilidades de la empresa. Este tipo de auditorías son quizá las más conocidas.
Tipos de auditoría y sus beneficios
En líneas generales, las auditorías suponen una mejora notable en la eficiencia y eficacia del funcionamiento de las empresas. Ahora bien, existen diferentes tipos según quién las lleve a cabo y si se trata de una empresa privada o una del sector público. Básicamente, según la naturaleza de quien audita, se pueden distinguir dos tipos:
- Auditorías internas. Estas auditorías se caracterizan por la peculiaridad de que quien lleva a cabo la auditoría forma parte del personal propio de la empresa.
- Auditorías externas. En este caso, la auditoría la llevan a cabo profesionales de otra empresa contratada para ello o auditores de un tercero con quien se quiere firmar una fusión.
Por otro lado, están las auditorías públicas, que son realizadas por un organismo público y a petición de una institución pública. Esta labor recae en el Tribunal de Cuentas en el territorio español. No obstante, independientemente de si la auditoría es interna o externa, todavía caben distinciones en función del objetivo de las mismas. A continuación, se enumeran los distintos tipos:
- Auditoría financiera o de cuentas. El objetivo de esta inspección o análisis no es otro que el de verificar la veracidad de las cuentas de una empresa. Es el tipo de auditoría más conocido y con el que se destapan los fraudes económicos y los errores contables.
- Auditoría de operaciones. Con este tipo de auditorías se analizan los procesos, es decir, el funcionamiento de los sistemas de toma de decisiones, la forma de trabajar de los equipos y la comunicación entre los distintos departamentos de la empresa. No es tan conocida, pero es realmente eficaz para detectar fallos de gestión y productividad.
- Auditoría informática. Sirve para verificar la seguridad de los sistemas informáticos y su adecuación a la normativa vigente. En este punto, la Ley de Protección de Datos es muy importante, pero también todos los protocolos de cifrado y seguridad de las comunicaciones.
- Auditoría medioambiental. Un tipo de auditoría que debería hacerse más a menudo vistos los efectos que el cambio climático está produciendo ya a nivel mundial. Con estas auditorías se analiza el impacto ambiental de la actividad productiva de una empresa.
Ventajas de una auditoría contable
Una auditoría contable ofrece a las empresas la oportunidad de mostrar una mayor transparencia y fiabilidad de su negocio frente a terceros. De esta manera, tanto los clientes, como los proveedores, como futuros inversores, se verán más atraídos hacia dicha empresa. Pero, además, las auditorías contables añaden otras ventajas:
- Hacen más eficaz la gestión contable.
- Ayudan a mejorar los controles internos.
- Detectan todo tipo de errores y omisiones, facilitando su corrección.
- Son imprescindibles para destapar situaciones de fraude.
- Sirven para tener un mejor conocimiento del estado patrimonial de las empresas.
Qué empresas están obligadas a auditar sus cuentas
La Ley de Sociedades de Capital española establece los límites según los cuales una empresa está obligada a auditar sus cuentas. Estos límites son: Que el total de sus activos sea superior a los 2,85 millones de euros; Que el importe neto de su cifra de negocio sea superior a 5,7 millones de euros anuales; y que el número medio de trabajadores supera los 50.
Ahora bien, para que la auditoría contable sea una obligación en estos términos, las empresas deben cumplir con dos de los tres requisitos durante dos años consecutivos. Si esta situación no se da, las empresas no tienen por qué tener este control anual contable. Y si es de nueva creación y cumple con dos criterios durante el primer año, también deberá auditar sus cuentas.
Pero, es que, además, existen otros criterios menos conocidos, recogidos en el Reglamento de Auditoria, relacionados con subvenciones y ayudas, contratos con las Administraciones Públicas, específicos para fundaciones y cooperativas, empresas de seguros privados, o empresas cuyos estatutos incluyan la obligación de auditar.