Los activos de Ferroatlántica transferidos en esta transacción incluyen diez centrales hidroeléctricas con una capacidad de generación combinada de aproximadamente 167 MW, y la fábrica de ferroaleaciones Cee-Dumbría, todos ubicados en la provincia de A Coruña. Simultáneamente,  Ferrogloble firmó un acuerdo con Ferroatlántica en virtud del cual será el comprador exclusivo de los productos terminados de la fábrica de Cee-Dumbría. A cambio de esta exclusividad, Ferroglobe se compromete a suministrar a Ferroatlántica materias primas clave a largo plazo.

La transacción, valorada en 170 millones de euros, proporciona ingresos brutos de 156,4 millones a Ferrogloble, después de los ajustes acordados. Los ingresos se utilizarán para reembolsar 57 millones del endeudamiento existente en Ferroatlántica y las tarifas de transacción relacionadas, y los restantes 100 millones se mantendrán en efectivo y se utilizarán para fines corporativos generales.

En relación a a esta venta, Javier López Madrid, presidente ejecutivo de Ferroglobe, ha señalado que "la desinversión de Ferroatlántica marca un logro significativo y el rápido cierre de una transacción muy compleja. La transacción mejora el valor para Ferroglobe y representa un hito importante en los esfuerzos de la compañía para fortalecer su balance general, particularmente mientras trabajamos para completar la refinanciación de nuestra línea de crédito renovable".

Movilizaciones

Por su parte, el comité de Ferroatlántica Cee-Dumbría-Centrales Hidroeléctricas ha anunciado que iniciará movilizaciónes a partir del próximo lunes 9 "en resposta ao mutismo e ao deixamento da Xunta á hora de esixirlle á empresa un plan de viabilidade". El comité señala que este plan de viabilidad es de obligada elaboración, se produjese o no la venta del complejo industrial y energético.