Entrevista al presidente de la CEG, Juan Manuel Vieites

"La recuperación de la economía se está ralentizando; estamos en una encrucijada histórica"

Entrevistamos al presidente de la CEG, Juan Manuel Vieites, con motivo de su primer año en el cargo. Con él analizamos las problemáticas que preocupan al empresariado gallego: alza de precios de energía y materias primas, infraestructuras, mercado laboral, la situación de las industrias gallegas, la competencia del Norte de Portugal o los fondos Next Generation.
"La recuperación de la economía se está ralentizando; estamos en una encrucijada histórica"

Hace un año era elegido presidente de la patronal gallega, que cerraba así la etapa de interinidad e inestabilidad en la que se había instalado en los últimos años. ¿Hoy tenemos una CEG más unida que nunca?

Juan Vieites: “Yo creo que sí. El sentido común que tenemos los gallegos ha hecho que entre todos intentemos buscar ese consenso. Tanto las confederaciones provinciales como las sectoriales hemos intentando en este año último acomodar esa nueva Confederación de Empresarios de Galicia a los nuevos tiempos, con todas las dificultades que tenemos, en un momento de post pandemia, en la sexta ola, y donde las empresas quieren intentar ir hacia adelante y buscar ese consenso. Con esa colaboración público-privada tan importante para seguir creando riqueza.

Además de poner en valor la actual CEG, que es la que representa a los empresarios gallegos dentro del diálogo social y trabajando, mucho esfuerzo, mucho trabajo, intentando que las cuestiones que planteé en la presentación de mi presidencia sigan llevándose adelante. Creo que hemos avanzado enormemente".

¿Para qué ha servido este primer año de su mandato? ¿Cuáles destacaría como hitos principales de estos 12 meses?

J.V.: “Desde el principio rodearme de un equipo importante, en el cual ese esfuerzo y trabajo y esa cohesión e imagen de unidad se pudiera dar. Para ello tanto al comité directivo, la junta directiva y el comité asesor se han incorporado empresas de primer nivel, y eso significa que somos una Confederación que defiende no sólo a las grandes empresas sino también a las pymes y a las microempresas.

Seguimos trabajando con total independencia y buscando soluciones, medidas adecuadas para que las empresas puedan seguir creando riqueza y empleo".

Le ha tocado dirigir la Confederación de Empresarios de Galicia en un momento complicado, con la crisis sanitaria y económica causada por el covid-19, ¿cuáles son las prioridades de la patronal gallega en este contexto?

J.V. “Hay aspectos importantes: desde las políticas de fiscalidad, políticas energéticas, la eliminación de la burocracia, intentar que la administración cada vez sea más ágil; intentar que en el mercado laboral, la reforma laboral, el salario mínimo, no distorsione a las empresas y que haya una estabilidad futura, y una competitividad y una productividad por parte de las empresas adecuada para seguir creando riqueza y empleo. Son aspectos prioritarios para el empresariado.

Nos encontramos con las materias primas en una situación compleja, tanto la escasez como el alza han supuesto un impacto a las empresas, en sectores clave como la automoción, el naval, el metal, la pesca, la construcción, la logística, el transporte; hay mucho trabajo por delante que hacer.

Sin olvidar otras cuestiones también importantísimas: tenemos que tener talento en las empresas, la formación es fundamental, desde la formación universitaria adecuada a los tiempos empresariales como la formación profesional, tanto la dual como la normal. Y yo creo que son aspectos en los cuales la Confederación está intentando dar respuestas.

E intentar que los problemas no se multipliquen, porque en esta situación que nos encontramos donde podemos ver aspectos como una inflación tan elevada, precios de la energía tan elevados, hay bastantes incertidumbres y esa recuperación económica no acaba de consolidarse. Y por tanto tenemos que entre todos buscar las medidas adecuadas y esperando que el año no sea negativo y que los bolsillos de los consumidores pero también las situaciones económico-financieras de las empresas no se vean distorsionadas. 

Con estos encarecimientos de los suministros  y ese pesimismo del índice del sentimiento empresarial... intentemos jugar con todos estos ingredientes y buscar que toda esta inseguridad sobre las perspectivas futuras se conviertan en potencialidades de cara al futuro para intentar que las empresas salgan bien de esta post pandemia”.

 

Me gustaría conocer ahora el posicionamiento de la CEG sobre algunos de los principales temas que preocupan en Galicia. Para empezar, el alza de precios de energía y materias primas, sobre lo que esta misma semana la propia patronal y representantes del sector mar-industria alertaban. ¿Qué medidas reclaman para hacer frente a este escenario de incertidumbre?

J.V. “Está claro que esto repercute y  compromete la recuperación  económica de las empresas en distintos sectores de actividad. Nos estamos enfrentando a la tormenta perfecta y eso significa que la automoción, el naval, el metal… son sectores que se ven muy involucrados en esta situación, produciendo además momentos difíciles para algunas de las empresas. 

Desde hace un año el transporte marítimo de contenedores con una media del 224% , el aluminio un 40% el cobre, un 63% otros metales un 17,6%, y  ya no digamos los récords históricos de la luz y el gas que afectan a los procesos productivos industriales. Por lo tanto la rápida recuperación de la economía que pretendíamos se está ralentizando; creo que estamos en una encrucijada histórica y eso significa que tenemos que intentar reducir la dependencia del exterior. Creo que debemos incrementar el peso del sector industrial respecto al PIB y coger músculo industrial en Europa y España y reducir la dependencia del exterior.

El transporte se está viendo muy afectado por la subida de los combustibles, el petróleo con 100 dólares en este momento y eso significa que hay márgenes inexistentes, el problema añadido de gran escasez de conductores… En definitiva tenemos bastantes cuestiones que hay que abordar.

Y el sentir general es que la sociedad tiene que, en este cambio de cultura que se está produciendo debido a las ODS, a los objetivos de desarrollo sostenible a partir del 2030, una sociedad más digitalizada, con más economía verde, más economía circular, focalizada en las personas... Son aspectos en los cuales de cara al futuro tenemos que seguir insistiendo y buscar soluciones que puedan equilibrar cualquier distorsión que se pueda producir en las empresas, que son a la postre las que crean esa riqueza y empleo de manera mayoritaria”.

Justo esta semana se paraba la última cuba de Alcoa, un cierre, en principio temporal, pero que se produce tras otros cierres sonados, el ERE en Vestas Viveiro, el cierre de Siemens-Gamesa en As Somozas, las centrales térmicas de As Pontes y Meirama, el concurso de acreedores en Alu Ibérica A Coruña, ¿tiene futuro la industria gallega?

J.V.: “Yo creo que sí, si por parte de las administraciones se pone el campo de juego adecuado creo que tiene futuro. Tenemos unos sectores industriales muy potentes y determinantes y creo que lo que hay que hacer es avanzar en nuevas políticas industriales y no en soluciones impuestas. Hay que buscar las más convenientes en esa colaboración público- privada entre las empresas y la administración, tanto autonómica como local como a nivel del Estado o comunitario.

Por ejemplo en el caso de la automoción, consideramos que la electrificación es la tecnología elegida por los políticos y no por la industria. Se ha impuesto una solución que no sabemos si es la más conveniente o no, y en países vecinos como Francia o Alemania la implementación de ayudas ha sido inmediata y mucho más ágil, y debemos movernos rápido. Porque si no aprovechamos los fondos europeos,los Next Generation y los plurianuales hasta 2027, y trabajamos para que la burocracia excesiva deje de ser un obstáculo, realmente nos podemos encontrar con expectativas poco halagüeñas de cara al futuro. Pero yo soy optimista, tenemos un sector industrial importante, que si se tomaen las medidas adecuadas tanto por la UE como por el Gobierno de España, podemos prevenir una pérdida de industria y de empleo difícilmente recuperable si la dejamos caer.

Tenemos zonas en Galicia muy complicadas: la Mariña lucense, la zona de Ferrolterra, de As Pontes, y algunas zonas de interior de Ourense, Lugo, incluso el naval en Vigo, donde debemos buscar las soluciones más adecuadas. Y debemos tomar esas medidas desde el level played field, el cumplimiento de normas para todos igual, con vigilancia y control. A veces nos vemos en una situación de fragilidad en un entorno europeo donde nuestras administraciones deberían estar peleando, luchando para que nuestras empresas estuvieran bien.

Tenemos mucha labor que hacer; en Galicia estamos en el 13% del PIB, tenemos que llegar al 20%; tenemos que ser amigables con la inversión, con los inversores, para que esos inversores apuesten por nuestra comunidad autónoma. Y ahí tenemos mucho que trabajar, con soluciones progresivas, constantes y que no sean impredecibles, que esto genera la mayoría de la veces desconcierto y falsas expectativas que después realmente solo pueden producir incertidumbre”.
 

Se habla de la gran oportunidad que suponen los fondos Next Generation, pero ¿han comenzado a llegar estos fondos a las empresas, en especial pymes?

J.V.:
“Lo cierto es que los fondos están retrasándose de una manera muy importante. El Gobierno del Estado ha cogido la batuta de estos fondos, es el que distribuye estos fondos a través de los ministerios. Creemos que deberían jugar un papel fundamental las comunidades autónomas, pero de una manera equilibrada, no por simples ideologías o políticamente sino basándose en datos económicos de rentabilidad, de eficiencia y productividad.

No lo digo yo, lo dice el propio Banco de España, que los problemas se  están multiplicando en relación a las dificultades que debemos solventar para que estos fondos Next Generation puedan llegar ágilmente a las empresas. Pero no solamente a las grandes empresas, o a sectores de empresa determinados, sino también a las pymes, incluso a las micro, a través de esas subcontrataciones que deberían ser obligatorias. 

Cuando se está poniendo encima de la mesa cantidades de dinero tan importantes para estos nuevos horizontes que se nos presentan de economía circular, economía verde, digitalización… todos debemos participar y eso debe fluir a la economía en general, no solo a una parte de la economía”.

 

En diciembre también entraba en funcionamiento, tras muchos años de retraso, la línea de alta velocidad entre Galicia-Ourense y Madrid,¿cuáles son ahora las principales demandas en infraestructuras por parte del sector empresarial gallego?

J.V.: “Creo que la línea de AVE Madrid a Galicia ha llegado a Ourense, cosa que estamos muy contentos después de 20 años, dos décadas son demasiado. Espero que conlleve que Ourense, esa Galicia interior, se desarrolle de una manera importante. Y por otra parte lo que pido es que el AVE tiene que llegar de manera competitiva a las principales ciudades de Galicia; no puede ser que llegue en 4 o 3 horas 45 a otras ciudades de Galicia, donde estamos casi doblando el tiempo. 

Después la intermodalidad debe ser uno de los aspectos importantes; otra de las cuestiones son las frecuencias de este AVE, y no nos debemos olvidar de los recorridos interiores de ferrocarril en nuestra comunidad

En el tema del ferrocarril esa conexión con Portugal debe ser fundamental. Los portugueses ya han hecho sus deberes hasta la frontera con Tui, y nosotros no hemos hecho los deberes para que el AVE llegue a la frontera de una manera competitiva y con las frecuencias suficientes. Soy consciente de que desde la Xunta se está reclamando.

No me olvidaría de los puertos. Esa conectividad con el ferrocarril es fundamental y hay que intentar hacer llegar a los puertos más competitivos gallegos el ferrocarril, porque eso nos dará una mayor competitividad desde el punto de vista de la logística y el transporte".



¿Por qué las empresas gallegas se van al Norte de Portugal? ¿Falta suelo industrial? ¿O es cuestión de precios? 

J.V.: “Hay un poco de todo, hay mucho suelo industrial pero en zonas menos competitivas para los sectores empresariales, y el tema del coste también. Pero más que el tema el coste y el volumen yo creo que es la burocracia, cuando uno se quiere colocar en un parque empresarial empiezan los problemas. Más allá de la ‘raia’ la agilización por parte de las administraciones es total, y eso es lo que lleva a que muchas empresas se coloquen en la otra ‘raia’ de Portugal. Si eso lo unimos a los costes laborales, al SMI, que es bastante menor que en España, son cuestiones en las cuales son muy competitivos los portugueses, y eso es lo que hace que las empresas se coloquen en el norte de Portugal, hay muchisimas empresas españolas y no es por casualidad”.

Uno de los puntos fuertes de nuestras empresas es la internacionalización, el año pasado hasta noviembre, se exportaron bienes por valor de más de 23.000 millones de euros, ¿ese es uno de los caminos para la recuperación?

J.V.: “
Lo fue en la crisis del 2008, lo es ahora en la crisis del covid-19. Creo que efectivamente esa exportación tan importante lo que nos hace es tener una potencialidad muy importante en mercados de Latinoamérica, África, sobre todo Europa, creo que somos competitivos y ahí es donde aspectos que ahora se están debatiendo como el mercado laboral, convenios colectivos, el SMI, las pensiones, son cuestiones que nos debe hacer recapacitar para intentar tener un marco amigable y acordado dentro del diálogo social.

Si lo sacamos de ese contexto tenemos un problema, para ser competitivos y que la productividad pueda subir, porque ha bajado de manera significativa, hace falta que por parte de todos seamos amigables y tomemos medidas adecuadas para que la inflación no impacte sobre las empresas y sobre la sociedad en general". 

Para finalizar, me gustaría que enviara un mensaje al empresariado gallego sobre lo que pueden esperar de  la CEG de este 2022.

J.V.: “Desde la CEG, los equipos propios internos, como los órganos de gobierno y el propio consejo asesor y el presidente, lo que estamos es buscando que todo el complejo empresarial, de todo esos sectores tan importantes que tenemos aquí, desde la madera, el agroalimentario, el naval, el automóvil, las energías… tenemos grandes potencialidades, y desde la CEG vamos a seguir trabajando para intentar el mejor acomodo de las empresas gallegas a la hora de comercializar sus productos en el mercado español y en los mercados exteriores.

El poner el campo de juego adecuado, la fiscalidad, la burocratización… son aspectos en los cuales vamos a seguir insistiendo. Vamos a seguir insistiendo en que se apoye a las empresas y vamos a exigir que estos Next Generation de una manera clara puedan impactar en nuestro tejido productivo, a nivel de todas empresas, no solo las grandes empresas, sino las pymes y las microempresas, para intentar hacer una Galicia más rica y con más empleo y con unos horizontes de futuro mucho mayores”.

"La recuperación de la economía se está ralentizando; estamos en una encrucijada histórica"